A continuación os dejamos la reflexión de Ana Belén sobre el amor que a nosotros personalmente nos ha encantado
¿Qué es el amor?
El amor no es posesión
Posesión es tener algo en tu poder.
Es que algo es tuyo y te pertenece.
Pero desde el mismo momento en el que exiges esa pertenencia y ejerces esa posesión, empiezas a perder lo que amas.
El amor nace en seres libres que respetan la libertad del otro.
El amor es una elección que espíritus afines realizan al mismo tiempo.
El amor es compartir las luces y las sombras que conforman cada espíritu y que son lo que hace a cada persona única y especial.
El amor es entrega de lo más valioso y auténtico que hay en cada alma.
El amor nace en seres completos que han recorrido el camino del amor a uno mismo.
El amor no es necesidad
Necesitar implica carencia de algo.
Algo te falta y eso te convierte en un ser incompleto.
Necesitar amor implica depender de la persona que te va a rellenar el hueco que te falta.
Y cuando dependes de alguien, ese alguien pasa a ser más importante que tú mismo.
Y aunque no llegues a ser consciente de ello, tus elecciones ya no te pertenecen por completo, pues están determinadas por la persona de la cual dependes, la que te otorga aquello que te falta.
Un mendigo de amor nunca podrá ser capaz de amar.
¿Qué de valioso puede entregarte?
Un corazón rebosante de amor por si mismo, podrá amar sin medida, de forma espléndida, como debería ser el buen amor, el sano amor.
El amor no es cobardía
Cobardía es lo contrario de valentía.
Y valentía es esfuerzo.
Y el esfuerzo es lucha.
Y para luchar es necesario estar convencidos de que eso por lo que estoy luchando merece la pena, pues de lo contrario mis esfuerzos pueden resultar vanos.
Me doy cuenta de que algo merece la pena cuando mi corazón salta y mi pecho se ensancha y el mundo a mi alrededor parece más ligero.
Somos cobardes cuando somos insinceros y no nos mostramos como somos porque tenemos miedo, por eso nos ponemos nuestras particulares máscaras de agrado.
Somos cobardes cuando no nos atrevemos a decir lo que sentimos porque tenemos miedo de ser lastimados y no correspondidos.
Somos cobardes cuando tenemos miedo de amar.
Y el amor solo puede nacer en los corazones valientes.
Porque un corazón valiente nunca tiene miedo de ser lastimado,
porque no necesita poseer
y contiene dentro de si mismo todo aquello que necesita.
Ana Belén Balsas Clavería,
Esencias de Poder
¿Qué es el amor?
El amor no es posesión
Posesión es tener algo en tu poder.
Es que algo es tuyo y te pertenece.
Pero desde el mismo momento en el que exiges esa pertenencia y ejerces esa posesión, empiezas a perder lo que amas.
El amor nace en seres libres que respetan la libertad del otro.
El amor es una elección que espíritus afines realizan al mismo tiempo.
El amor es compartir las luces y las sombras que conforman cada espíritu y que son lo que hace a cada persona única y especial.
El amor es entrega de lo más valioso y auténtico que hay en cada alma.
El amor nace en seres completos que han recorrido el camino del amor a uno mismo.
El amor no es necesidad
Necesitar implica carencia de algo.
Algo te falta y eso te convierte en un ser incompleto.
Necesitar amor implica depender de la persona que te va a rellenar el hueco que te falta.
Y cuando dependes de alguien, ese alguien pasa a ser más importante que tú mismo.
Y aunque no llegues a ser consciente de ello, tus elecciones ya no te pertenecen por completo, pues están determinadas por la persona de la cual dependes, la que te otorga aquello que te falta.
Un mendigo de amor nunca podrá ser capaz de amar.
¿Qué de valioso puede entregarte?
Un corazón rebosante de amor por si mismo, podrá amar sin medida, de forma espléndida, como debería ser el buen amor, el sano amor.
El amor no es cobardía
Cobardía es lo contrario de valentía.
Y valentía es esfuerzo.
Y el esfuerzo es lucha.
Y para luchar es necesario estar convencidos de que eso por lo que estoy luchando merece la pena, pues de lo contrario mis esfuerzos pueden resultar vanos.
Me doy cuenta de que algo merece la pena cuando mi corazón salta y mi pecho se ensancha y el mundo a mi alrededor parece más ligero.
Somos cobardes cuando somos insinceros y no nos mostramos como somos porque tenemos miedo, por eso nos ponemos nuestras particulares máscaras de agrado.
Somos cobardes cuando no nos atrevemos a decir lo que sentimos porque tenemos miedo de ser lastimados y no correspondidos.
Somos cobardes cuando tenemos miedo de amar.
Y el amor solo puede nacer en los corazones valientes.
Porque un corazón valiente nunca tiene miedo de ser lastimado,
porque no necesita poseer
y contiene dentro de si mismo todo aquello que necesita.
Ana Belén Balsas Clavería,
Esencias de Poder